Eros

Ya tenemos encima el 14 de Febrero, día de San Valentín: Día del amor y la amistad. Y nos vemos asaltados por multitud de angelitos asexuados y nalgones por doquier que nos apuntan con sus arcos de flechas con puntas de corazón.

Sin embargo, el pobre Eros, conocido también como Cupido no siempre ha sido representado con esa imagen ridícula. A decir verdad es difícil creer que un Dios protogeno sea tan “infantil”.

De acuerdo con el mito órfico de la creación dice que:

“La Noche de alas negras, una diosa por la que el propio Zeus siente un temor reverente, fue cortejada por el Viento y puso un huevo de plata en el seno de la Oscuridad; y que de este huevo salió Eros y puso en movimiento el Universo. Eros era bisexual y tenía alas de oro, y con sus cuatro cabezas unas veces rugía como un toro o un león y otras silbaba como una serpiente o balaba como un carnero. La Noche vivía con él en una cueva y se revelaba en forma de tríada: Noche, Orden y Justicia. Ante esta cueva se sentaba la ineludible madre Rea, tocando un tambor de bronce para captar la atención del hombre y obligarlo a escuchar los oráculos de la diosa. Eros creo la tierra, el cielo y la luna, pero la triple diosa gobernaba el universo hasta que su cetro pasó a manos de Urano”

Tomado de: Graves, Robert (2008). “Los mitos griegos” . Editorial  Ariel, Madrid.

Ahora bien, Eros como creador del Universo, nos dice que el amor es la fuerza creadora del Universo.

Pero con el el tiempo, el mito se fue olvidando y llego a escena un nuevo Eros, hijo de Afrodita y Hermes o de Ares o de Hefestos--yo me decanto más por Hermes-- (el que se deformo en el niño travieso y nalgón que vemos año tras año por doquier en estas fechas). Para comprender a este nuevo Eros hay conocer un poco de la historia de como fue procreado.

El nacimiento de Eros

Afrodita diosa del Amor fue entregada en matrimonio a Hefestos (El dios herrero, feo y cojo del Olimpo). Afrodita tenía romances a diestra y siniestra, pero su amante predilecto era Ares (el dios de la guerra, además de macho alfa del Olimpo). Hefestos sospechando que su lujuriosa mujer le ponía el cuerno, ideo un plan para ponerla en evidencia ante los demás dioses del Olimpo. Para ello forjó una delicada red que puso en su lecho nupcial. Posteriormente le dijo a Afrodita:

--Querida esposa iré a Lemmos de vacaciones, ¿no vienes?

--No, gracias. Tengo pendientes en el Olimpo—respondió Afrodita que vio la ocasión perfecta para citarse con su amante Ares.

Hefestos salió, y al poco rato Afrodita mando llamar a Ares. Por la noche regreso Hefestos y aprisionó a su mujer y a su hermano con la red que había dispuesto en la cama. Al momento mando llamar a los demás dioses del Olimpo. Todos se presentaron ante Hefestos que les contaba de la infidelidad de su mujer y de Ares. Las diosas respetuosas (ajá) de la vergüenza ajena no entraron a los aposentos de Hefestos. Los dioses vieron la escena de la diosa atrapada junto a su amante, que hasta cierto punto era cómica, erótica y morbosa.

Hefestos discutía con su padre, Zeus, sobre el castigo que merecían los amantes. Mientras Apolo y Hermes cuchichiaban cerca:

--Hermano, a ti no te importaría estar en el lugar de Ares, ¿No es cierto?—decía con mofa Apolo a Hermes

--¡Claro que no! Aunque me pusieran cuatro redes y las diosas me vieran.

Tras una discusión Hefestos anuló su matrimonio con Afrodita y castigo a Ares no forjándole armamento por un tiempo.

Afrodita fue al mar a restaurar su virginidad, y después se reunió con Hermes para compensarlo por su declaración de amor que dijo a Apolo. De esa unión nació el Eros mensajero del amor (mensajero por su padre y del amor por su madre).

Algunas historias de Eros

Eros y castigo a Apolo.

Para cumplir con su cometido Hermes y Afrodita le dieron arco y flecha para con ellas dar el “flechazo” a los enamorados.

Apolo, dios de cacería varias veces se burlaba de sus sobrino. Por ello Eros decidió darle una lección. Tomo una flecha de oro con la que flechó a Apolo que quedo profundamente enamorado de Dafne. Mientras que Dafne le lanzo una flecha de plomo que causo el efecto contrario de Dafne a Apolo.

Apolo locamente enamorado de Dafne comenzó a seguirla por todas partes, pero ella no podía sentir amor por el dios y huía de él desesperadamente. La ninfa pidió a Gaia que la salvase, y la madre tierra la escucho y la transformó en laurel. Apolo llegó a ella cuando se transformaba en el árbol. Apolo desconsolado lloró abrazando el árbol.

--Si no puedes ser mía, entonces serás mi árbol predilecto y con tus hojas coronaré la cabeza de todo aquel que salga victorioso.

La lección de Eros, fue dura, pues Apolo no se volvió a enamorar de ese modo, a decir verdad nunca se casó, aunque si tuvo algunos hijos y amantes.

 

Eros y Psique

 

 

 

El mensajero del amor también lo sentía y está historia lo demuestra.

Afrodita, que no quería competencia de belleza, supo que una joven de nombre Psique era muy hermosa, lo que causo celos a la diosa. Para castigarla por su belleza envió a Eros a que le lanzará una flecha de oro oxidado para que se enamorará del hombre más feo posible.

Eros obediente, se presento a hacer su trabajo pero al ver a Psique se enamoró de ella. Por la noche el dios llegó a la habitación de Psique y la rapto. Se la llevó a su palacio en los cielos. Para evitar la ira de su madre, Eros sólo se presentaba de noche ante Psique y totalmente a oscuras, prohibiéndole que trate de saber quién es él. Todas las noches se amaban apasionadamente. Hasta que un día Psique le dijo a Eros:

--Amor mío, extraño mucho a mis padres y hermanas. ¿No podría volver con ellos?

--Te puedo regresar a tu casa si es lo que deseas. Pero, debo advertirte que tus hermanas trataran de hacerte daño y dañar el amor que nos tenemos.—le contestó Eros

--El amor que siento por ti es más fuerte que lo que puedan decir mis hermanas.

Eros prometió regresarla a casa de sus padres.

Una vez en casa de sus padres las hermanas de Psique a diario le preguntaban por su misterioso marido. Psique contestaba evasivamente, hasta que un día no pudo más y confeso que no le conocía.

--Seguramente, a de ser monstruoso si no te muestra su cara—decía una de ellas

--O quizás está deforme o viejo—le decía la otra

--¿No tienes curiosidad de saber cómo es él?

Psique no sabía que responder. Su hermana mayor le sugirió:

--Porqué no le ves la cara esta noche, en la madrugada prendes una vela para ver su rostro y sales de dudas.

Esa noche cuando se presento Eros. Tras su romance. Psique toma una vela y la enciende y la pone sobre el rostro de su amada, pero la suerte quiso que una gota se cera caliente callera en el pecho de Eros que despertó, asustado, dolorido (en cara y alma) y abandona a su amada.

Afrodita ahora más furiosa que antes castigo a Psique, la maldijo la dejó sola y triste. Para recuperar el amor de Eros, Psique ruega a Afrodita que le perdoné, pero la diosa le impone varias tareas como separar granos de cebada, trigo y arroz. Escalar hasta lo alto de un peñasco para obtener agua de un manantial, sin duda una suegra cruel y severa.

La última prueba consistía en ir a los infiernos y pedirle a Perséfone un poco de belleza divina para sanar a Eros, misma que debía ser puesta en una caja mágica y negra que le entregó Afrodita. Tras llegar al inframundo y vencer los retos que ahí se le presentaron: pagar a Caronte, apaciguar al can Cerbero y no probar alimentos. Perséfone le da lo que pide. Al salir a tierra, Psique decide usar un poco de la belleza divina en si misma para que Eros la amé por siempre. Pero al abrir la caja un sopor mortal la invadió. Eros contempló aquello y bajo hasta Psique y deshizo el hechizo mortal que sobre Psique caía.

Ella abrió los ojos y al ver a su amado no pudo contener las lágrimas y lo abrazo y beso. Eros sonriente y lleno de amor la abrazo y beso. La tomo en sus brazos y la llevo ante el rey del Olimpo, para pedir por su amada la inmortalidad y eterna juventud de los dioses. Zeus al saber de todas las pruebas que pasó Psique para estar al lado de su amado le concedió tales dones. Para que su amor fuera perpetuo y fiel.Hijo de Eros y Psique es el dios Placer.

 

Los Hermanos de Eros

Anteros

Afrodita y Hermes (cada uno por su lado) tuvieron varios hijos. Afrodita tuvo un hijo con Ares al que llamo Anteros, que bastante parecido tiene con Eros, sólo que Anteros tiene alas de mariposa. Ares y Afrodita decidieron que sería una buena idea que Eros y Anteros estuvieran juntos y trabajaran en conjunto. Pero, Anteros al principio sentía antipatía por su hermano y sólo lo molestaba.

Al final decidió no pelear más y volverse el vengador del amor no correspondido, fiel a su parte guerrera por parte de su padre y por ámbito de su madre. Cuenta una historia que:

El ateniense Meles, desdeñando el amor de Timágoras, le pidió que subiese al punto más alto de una roca y se arrojase al vacío. Timágoras, que estaba dispuesto a complacer a su amado en todo lo que pidiese, así lo hizo. Cuando Meles vio que Timágoras había muerto, sufrió tal remordimiento que se arrojó desde la misma roca y murió. Por esta razón alguna gente en Atenas adoraba a Anteros como el espíritu vengador de Timágoras.

 

Hímero

Es el dios de la lujuria y el deseo sexual.

Potos

Dios de la nostalgia y la añoranza, representa esa añoranza romántica por la que se puede morir.

Peito

Hija de Hermes y Afrodita diosa de la seducción y la persuasión.

Himeneo

De él proviene el nombre Himen, su función era hacer matrimonios felices. Hijo de Baco y Afrodita.

Ganimedes

Dios del amor homosexual. Ganimedes, no es un dios como tal, sino el amante y copero de Zeus.

Ganimedes, hijo del rey Tros(fundador de Troya), era el joven más guapo que existía, por ello fue elegido como copero de Zeus, sin embargo, la lujuria propia de los dioses le llego al rey del Olimpo y deseando tener en su lecho al joven mozo, Zeus se transformo en águila y rapto al muchacho.

Zeus pago su padre con una vid de oro (hecha por Hefestos) y par de magníficos caballos. El dios le otorgo la inmortalidad y la juventud eterna a su copero y amante. Además lo subió a los cielos como la constelación de Acuario.

 

Así que como podemos ver, Eros (Cupido) es algo más que ese angelito infantil y nalgón con el que nos quieren vender de todo para estas fechas.